Cumplir la normativa en materia de igualdad acabaría con las brechas

Cumplir la normativa en materia de igualdad acabaría con las brechas

06 MAR 2023 UGT

La Negociación Colectiva y los Planes de Igualdad, herramientas para la igualdad

A pesar de los efectos positivos de la reforma laboral y del aumento del SMI, que han beneficiado especialmente a las mujeres, continúan las desigualdades por lo que es necesario impulsar medidas en la Negociación Colectiva y exigir el cumplimiento de la normativa en materia de igualdad.

Con motivo del Día Internacional de la Mujer, el próximo 8 de marzo, UGT ha publicado el informe Unidas ganamos todas en el que se analiza la situación de la mujer en el mercado de trabajo, la evolución de las brechas de género o los efectos de los avances legislativos alcanzados en materia de igualdad.

El sindicato pone de manifiesto su compromiso para lograr que la igualdad entre mujeres y hombres se convierta en una realidad y alcanzar una sociedad más justa, inclusiva y solidaria puesto que, además de un derecho fundamental y una cuestión de justicia, la igualdad es un objetivo prioritario e irrenunciable para la organización y para la democracia que constituye una necesidad social y de nuestra economía.

El documento valora los avances en materia de igualdad gracias a la reforma laboral de 2021 e incide en el impacto positivo de la subida de un SMI que beneficia en mayor medida a las mujeres que son las que siguen teniendo, en general, salarios más bajos y peores condiciones laborales. Y subraya que, a pesar de que en 2022 mejoran algunos de los indicadores, las diferencias entre mujeres y hombres siguen siendo muy elevadas.

Algunos datos importantes

  • La tasa de actividad de las mujeres en 2022 fue del 53,84% frente al 63,75% de los hombres. Según datos de la EPA de 2022, la tasa de actividad de las mujeres creció respecto a 2021, a pesar de ello la brecha de género ha ascendido levemente en 0,07 puntos, situándose en 9,91 puntos.
  • Las mujeres son mayoría entre la población inactiva, y una de las principales causas es la dedicación a las labores del hogar, entre las que se incluye el cuidado familiar. Suponen un 87,71% de la población inactiva por este motivo.
  • La brecha de género se mantiene en la tasa de empleo, e incluso vuelve a aumentar respecto a 2021. Sin embargo, el descenso en la tasa de paro en 2022 fue algo mayor que la experimentada por los hombres (1,96 puntos frente a 1,79).
  • La segregación profesional se manifiesta en los sectores económicos y en los tipos de ocupación. El sector servicios aglutina el 88,65% de la ocupación femenina mientras en la industria, la construcción o la agricultura su presencia es minoritaria.
  • El 73,91% del empleo a tiempo parcial fue desempeñado por mujeres frente al 26,09% de los hombres.
  • La brecha salarial se reduce un 0,78% con respecto al año anterior, pero sigue siendo muy elevada (un 18,7%).
  • Los permisos no retribuidos continúan siendo solicitados mayoritariamente por mujeres.

Aumentar la vigilancia y endurecer sanciones

Para cambiar la situación, UGT reivindica, entre otras cosas, continuar con las mejoras brindadas por la reforma laboral e impulsar medidas de igualdad a través de los convenios colectivos y los planes de igualdad.

Además, hay que reforzar a la Autoridad Laboral para asegurar el cumplimiento efectivo de la normativa, endurecer las sanciones ante los incumplimientos e incrementar y mejorar las políticas activas de empleo con perspectiva de género, así como adoptar políticas con perspectiva de género en todos los ámbitos -especialmente en materia de cuidados-.

UGT espera que la ratificación del Convenio 189 por parte de España del Convenio, sea un acicate para seguir modificando aquellos aspectos que, hoy por hoy, aún constituyen diferencias no justificadas entre las trabajadoras del hogar y el resto de la población trabajadora. En este sentido, el sindicato insiste al Gobierno en la necesidad de abrir la mesa de Diálogo Social, tal como se hizo en el año 2011, para seguir dignificando las condiciones de empleo de un sector que en el año 2020 fue considerado esencial.

Combatir la violencia machista desde los centros de trabajo, adoptando protocolos de acoso sexual y acoso por razón de sexo, incluyendo el acoso sexual y sexista cibernético o invertir en educación en igualdad para lograr una cultura libre de violencias machistas y garantizar unas condiciones de trabajo y empleo decentes para el profesorado y personas trabajadoras del ámbito educativo, uno de los más feminizados.

Garantizar el derecho al aborto y a los derechos reproductivos y sexuales y acabar con la violencia obstétrica, así como avanzar en la eliminación de las violencias machistas, estableciendo la financiación necesaria y el estricto cumplimiento de las medidas acordadas en el Pacto de Estado contra la violencia de género y de los compromisos adquiridos con la firma del Convenio de Estambul.